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Tendencias 2024 en construcción y arquitectura
Año nuevo, tendencias nuevas. Así arrancamos este 2024, con una serie de novedades y retos en el sector de la construcción, arquitectura y diseño de interiores que nos interesa analizar.
En este nuevo paradigma de avances hacia prácticas más novedosas y respetuosas con el Medio Ambiente, forman la base que sustenta todas estas tendencias que abren el 2024. Y no es de extrañar que las tendencias apunten hacia prácticas sostenibles puesto que todavía se consumen más recursos de los necesarios en el sector de la edificación
Así pues, en este post, resaltaremos aquellas tendencias que serán guía de inspiración para arquitectos, constructores y diseñadores de interiores.
Tendencias 2024
1. Diseño biofílico
Este año, la conexión entre arquitectura y naturaleza seguirá siendo fundamental en el sector de la construcción, buscando acercar a las personas a su entorno natural. Más allá de ser simplemente una práctica sostenible, el diseño biofílico aspira a generar sensaciones particulares en los individuos al ocupar sus espacios vitales.
Este enfoque, originado en el biomorfismo, se propone incorporar elementos naturales tanto en exteriores como en interiores, creando ambientes que simulan la presencia de la naturaleza con el fin de mejorar el bienestar humano y fomentar una conexión más profunda con su entorno. Además de contribuir al aumento de la productividad, esta perspectiva potencia la creatividad de quienes interactúan con estos espacios impregnados de elementos naturales.
Puntos clave del diseño biofílico:
· Introducir elementos de la naturaleza estableciendo una conexión visual y sensorial con la naturaleza en entornos laborales. Esto se logra mediante la ubicación de áreas de trabajo cerca de elementos naturales, como ventanas con vistas a montañas o agua, y la presencia de plantas en interiores. Además, se enfoca en estímulos sensoriales como sonidos, olores y sensaciones naturales. La introducción de elementos en movimiento, como cascadas, y la consideración de cambios estacionales mediante plantas que crecen o mueren, también son aspectos clave en este diseño para promover un ambiente más armonioso y conectado con la naturaleza.
· Naturaleza análoga . Implica incorporar elementos de la naturaleza en la construcción, imitando las formas presentes en entornos vivos. Esto incluye trabajar tanto con elementos naturales, como plantas y árboles, como con elementos artificiales que reproduzcan estas formas. Para lograr este efecto, se pueden emplear colores naturales, formas evocadoras de la naturaleza y materiales como madera, lana, cuero o piedra. La idea es mejorar la conexión con la naturaleza para crear un ambiente que beneficie al ser humano.
· Naturaleza del espacio . Busca priorizar espacios abiertos que generen sensaciones de bienestar y descanso. No se limita solo a la inclusión de plantas o elementos de madera, sino a la creación de entornos que motivan a los empleados o usuarios a querer trabajar en ellos. Esto se logra mediante vistas despejadas que transmiten sensación de amplitud y libertad, así como la creación de zonas de relajación y lectura. La clave está en equilibrar elementos para que las personas sientan una conexión completa con la naturaleza, simulando no solo la presencia de plantas o agua, sino también la amplitud y libertad características de los espacios naturales.
2. Microliving o Small living
Este enfoque se fundamenta en otorgar prioridad a la funcionalidad sobre la amplitud del espacio.
Esta tendencia se caracteriza por la edificación de viviendas minimalistas y utilitarias, fusionando elementos estéticos y de confort. Nos referimos a espacios compactos, con dimensiones que oscilan entre 18 y 40 metros cuadrados, diseñados de manera práctica y eficiente.
Este tipo de vivienda es especialmente común en zonas altamente urbanizadas, como los núcleos centrales de las grandes ciudades. Dada la densidad de construcciones en estas zonas urbanas, se busca aprovechar al máximo cada espacio reducido para convertirlo en una vivienda funcional y cómoda.
Características:
· Espacios funcionales . No solamente son viviendas para dormir, son espacios en los que poder trabajar (debido al auge del teletrabajo) y ociar. La sala de estar y el comedor ocupan un mismo espacio, la cocina suele ser un espacio abierto y el dormitorio se ubica en la zona superior del hogar, accediendo mediante una escalera la cual dispone de más funciones.
· Viviendas ubicadas en zonas céntricas de grandes ciudades.
· Interiorismo atractivo . El mobiliario debe adaptarse a los espacios pequeños, abundan elementos con un diseño sofisticado pero práctico como mesas y escritorios plegables, camas desarmables de pared y cajones en los peldaños de la escalera.
3. Sostenibilidad
La creciente conciencia ambiental se encuentra cada vez más arraigada en la mente de los ciudadanos, lo que significa que en el año 2024, la sostenibilidad seguirá siendo una prioridad destacada en los ámbitos de la construcción y la arquitectura.
En la actualidad, el impacto ambiental en este sector es particularmente significativo, ya que los edificios contribuyen aproximadamente con el 40% del consumo energético y el 36% de las emisiones de gases de efecto invernadero. En un esfuerzo por contrarrestar este impacto, se vuelve crucial la adopción de prácticas sustentables, haciendo hincapié en el uso de materiales respetuosos con el medio ambiente y en el diseño eficiente en términos de energía. Además, la integración de tecnologías verdes se convierte en un elemento esencial para disminuir la huella de carbono de la industria de la construcción.
En este contexto, la adopción de medidas orientadas hacia la sostenibilidad no solo se presenta como una necesidad imperante, sino también como una oportunidad para la innovación y el desarrollo de prácticas que no solo benefician al medio ambiente, sino que también contribuyen al bienestar general. la sociedad. De esta manera, la industria de la construcción y la arquitectura se encaminan hacia un futuro donde la responsabilidad ambiental es un pilar fundamental en la toma de decisiones y en la ejecución de proyectos.
4. Nuevas tecnologías
La industria de la construcción y la arquitectura continúa adoptando y aprovechando las innovaciones tecnológicas, destacando especialmente la integración de herramientas como la inteligencia artificial (IA), la realidad virtual y la fabricación en 3D. Estas tecnologías están llevando a cabo una transformación significativa en la manera en que se conciben y construyen los edificios contemporáneos.
La implementación de estas tecnologías no solo es una tendencia, sino que se percibe como una necesidad estratégica para mantener la competitividad en el sector. Al hacer uso de la inteligencia artificial, se logra una recopilación de datos más precisa, mientras que el BIM (Building Information Modeling), o modelado de información para construcción, se convierte en un aliado fundamental al trabajar en conjunto con la IA. Esta colaboración potencia la capacidad de generación de proyectos más seguros, al tiempo que optimiza la gestión de recursos y aumenta la eficiencia en todo el proceso de construcción.
La realidad virtual, por su parte, no solo ofrece una representación visual inmersiva de los proyectos, sino que también facilita la toma de decisiones informadas y la identificación de posibles problemas antes de que surjan en la fase de construcción real. La fabricación en 3D, por otro lado, aporta una dimensión adicional al proceso, permitiendo la creación de componentes arquitectónicos de manera más eficiente y personalizada.
En consecuencia, la adopción y adaptación continua de estas tecnologías emergentes son esenciales para mantenerse a la vanguardia en la industria, promoviendo la innovación, la eficiencia y la seguridad en el diseño y construcción de edificaciones. Así, el futuro de la arquitectura y la construcción se moldea con la sinergia entre la creatividad humana y las posibilidades avanzadas que ofrecen estas herramientas tecnológicas.
5. Rehabilitación y reutilización
La revitalización y reaprovechamiento de estructuras existentes se mantendrá como una corriente destacada en este 2024. En consonancia con los principios de sostenibilidad, se observa un creciente interés en infundir una nueva vitalidad a edificaciones antiguas, preservando el legado arquitectónico y disminuyendo tanto el derroche como la producción de residuos asociados a procesos de demolición.
Este enfoque hacia la rehabilitación y reutilización se alinea no solo con las metas medioambientales, sino también con una apreciación creciente por la historia y la arquitectura del pasado. La restauración de edificios existentes no solo representa una práctica sostenible al reducir la necesidad de nuevos materiales de construcción, sino que también añade un valor cultural y estético a la comunidad.
La rehabilitación de inmuebles permite reinterpretar su propósito original, adaptándolos a las necesidades contemporáneas. Este proceso implica la incorporación de tecnologías modernas y prácticas sostenibles, convirtiendo estas estructuras en ejemplos vivos de cómo la fusión entre la historia y la innovación puede ser beneficiosa para comunidades y entornos urbanos.
Por tanto, la tendencia hacia la rehabilitación y reutilización no solo responde a imperativos medioambientales, sino que también refleja un cambio en la mentalidad hacia la valoración y preservación de la riqueza arquitectónica existente. En 2024, es probable que esta práctica continúe ganando impulso, conformando así un paisaje construido que celebra la sostenibilidad y la continuidad histórica.
6. Colores en tendencia
En el ámbito del diseño de interiores, en 2024 prevalecerá una paleta de colores vibrantes con un toque de elegancia. Los tonos que predominarán abarcan desde verdes y azules hasta amarillos y rojos más intensos, armonizados con tonalidades clásicas como piedra, beige y marrón.
Además, destacan colores como el verde oliva y la terracota, buscando infundir calidez y establecer una conexión con la naturaleza. Mientras tanto, el azul marino y la piedra gris mantendrán su posición en la cima, añadiendo un toque de elegancia atemporal al panorama de colores. Además, se prevé un resurgimiento de tonalidades brillantes como el coral, el rosa y el amarillo, destacando especialmente en paredes y objetos decorativos.
Esta variada paleta de colores no solo busca satisfacer preferencias estéticas, sino que también refleja una sensación de frescura y vitalidad en los espacios interiores. La combinación de tonos vibrantes y tonalidades más neutras promete brindar armonía y versatilidad en la decoración, permitiendo la creación de ambientes dinámicos y atractivos a lo largo del próximo año.
8. Iluminación acústica
La iluminación acústica se presenta como una fusión armoniosa entre una iluminación agradable y propiedades eficientes de absorción de sonido. Este enfoque innovador no solo busca proporcionar una iluminación atractiva, sino que también aborda las necesidades acústicas del entorno.
En la fabricación de productos de iluminación acústica, se opta por materiales sostenibles, tales como fieltro, botellas de plástico recicladas y otros materiales acústicos efectivos. Este compromiso con la sostenibilidad no solo contribuye a la reducción de residuos, sino que también refleja una conciencia ambiental en la elección de los materiales utilizados.
Este concepto va más allá de la mera funcionalidad, ya que la iluminación acústica busca crear ambientes más agradables y confortables al combinar la iluminación adecuada con soluciones que mejoran la calidad sonora del espacio. En esencia, es una integración inteligente de diseño, sostenibilidad y funcionalidad, creando productos que no solo iluminan sino que también contribuyen positivamente a la experiencia del entorno. La versatilidad de estos elementos los convierte en una opción atractiva para aquellos que buscan una iluminación que no solo sea estéticamente agradable, sino que también promueva la eficiencia acústica y el uso responsable de los recursos.
En conclusión, el año 2024 promete ser un periodo transformador para el sector de la construcción, la arquitectura y el diseño de interiores. A medida que avanzamos hacia un paradigma más centrado en prácticas novedosas y respetuosas con el medio ambiente, las tendencias que marcarán este nuevo capítulo se apoyan en la búsqueda constante de la sostenibilidad.
Desde la integración de elementos naturales en el diseño biofílico hasta la revitalización y reutilización de estructuras existentes, estas tendencias no solo responden a imperativos medioambientales, sino que también reflejan un cambio en la mentalidad hacia la valoración y preservación del patrimonio arquitectónico. Además, la adopción de tecnologías innovadoras, como la inteligencia artificial y la realidad virtual, promete redefinir la forma en que concebimos y construimos espacios habitables.
En este contexto, los profesionales del sector, desde arquitectos hasta constructores y diseñadores de interiores, encuentran en estas tendencias una fuente inspiradora que guiará sus proyectos hacia prácticas más eficientes y alineadas con las necesidades actuales.
Por tanto, no solo avanzamos hacia una arquitectura más sostenible y estéticamente rica, sino que también contribuimos al bienestar de quienes habitan y disfrutan de estos espacios, conformando un futuro donde la innovación y la responsabilidad ambiental convergen en la creación de entornos más saludables, funcionales y estéticamente cautivadores.
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